Mientras el alcalde de Huauchinango presume acciones para reforzar la seguridad, ciudadanos y fuentes extraoficiales denuncian una dura realidad: el municipio apenas cuenta con siete patrullas operativas, muchas de las cuales están inservibles o abandonadas en talleres mecánicos y la comandancia.
Este martes, el presidente municipal de Huauchinango Rogelio López Angulo, acompañado por el Secretario de Seguridad Ciudadana, teniente Ramón Rivas Piñón, y el Secretario de Gobernación, Alejandro Amador Sarmiento, encabezó una reunión con autoridades auxiliares. En el acto se comprometieron a fortalecer la seguridad y la gobernabilidad en el municipio, alineados con la estrategia estatal y federal. Afirmaron que escucharon las necesidades de las comunidades y delinearon nuevas acciones de vigilancia.
Sin embargo, lo dicho por las autoridades contrasta con lo que vive día a día la población. De las 20 patrullas que alguna vez tuvo Huauchinango –donadas por el gobierno de Miguel Barbosa– sólo 7 están circulando. De esas, 3 son utilizadas por marinos y mandos, una más se usa para funciones del UDAIM, y al menos 2 están en mal estado. El resto, según fotos proporcionadas por ciudadanos, se encuentra abandonado, descompuesto o chocado.
Desde la administración de Salomón Céspedes Peregrina, acusan, no se ha comprado ni una sola patrulla nueva. A esto se suma la falta de recursos destinados a seguridad, lo que limita las posibilidades de respuesta ante los crecientes problemas delictivos en comunidades y colonias.
Vecinos expresaron su inconformidad ante lo que consideran un discurso hueco del alcalde. "Hablan de estrategias, pero no hay patrullas; hablan de prevención, pero no hay policías en las calles", comentaron.
La contradicción entre el discurso oficial y la realidad vivida por la ciudadanía pone en duda la eficacia del gobierno municipal en temas de seguridad. La exigencia es clara: menos discursos, más resultados.
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