Fingen ser ministeriales, entran a la casa y m4t4n a “El Flaco”que estaba en prisión domiciliaria
El Flaco estaba bajo en prisión domiciliaria por haber matado a una persona
Los asesinos, que eran ocho, iban encapuchados, se llevaron dinero, celulares y hasta la memoria de las cámaras de vigilancia.
A la esposa que están en la casa la amarraron y taparon con una sábana.
La madrugada de este viernes, un comando armado irrumpió en un domicilio del fraccionamiento Viveros del Valle, en la ciudad de Puebla, donde ejecutaron a Héctor Romero Reyes, alias El Flaco, peligroso líder criminal que cumplía prisión domiciliaria por el delito de homicidio, contaba con una tobillera electrónica por medio del cual lo monitoreaban las autoridades peniteniarias. El ataque ocurrió alrededor de las 4:00 de la mañana, cuando al menos ocho personas —siete hombres y una mujer— encapuchados, con armas largas, chalecos y botas tácticas, se presentaron en la vivienda fingiendo ser policías ministeriales.
De acuerdo con los primeros reportes, los delincuentes derribaron la puerta principal del inmueble mientras gritaban que eran agentes judiciales. Dentro de la casa se encontraba Héctor Romero Reyes y su esposa. El hombre, confiado en que se trataba de una revisión relacionada con el proceso penal que enfrentaba, abrió la puerta, momento en que fue golpeado y amagado.
Los agresores lo llevaron a su dormitorio, donde le exigieron dinero en efectivo. Ante las amenazas, la víctima entregó una caja fuerte con aproximadamente 200 mil pesos. En medio del violento robo, la esposa del hombre fue amarrada y cubierta con una sábana.
La mujer relató a los policías que mientras estaba sometida escuchó al menos tres detonaciones de arma de fuego. Posteriormente, al percatarse de que los delincuentes continuaban saqueando la vivienda, se mantuvo inmóvil hasta que los invasores se retiraron. Los sujetos revisaron los cuartos, despojaron a la familia de siete teléfonos celulares y, en un movimiento que demuestra organización, se llevaron también el DVR del sistema de cámaras de seguridad, lo que apunta a que intentaron borrar cualquier evidencia de su irrupción.
El comando habría permanecido en el lugar cerca de 30 minutos, de acuerdo con los testimonios. Tras la huida, la mujer logró liberarse y encontró a su esposo tirado en el suelo con impactos de bala, ya sin vida. Fue entonces que pidió auxilio a una vecina, quien prestó su teléfono celular para alertar a las autoridades.
Los responsables escaparon en al menos tres vehículos: una camioneta Cherokee color negro con códigos, un Pointer blanco, un Tsuru azul marino y un automóvil tipo Gol color azul. Ninguno de los testigos pudo identificar las placas.
La víctima, de 51 años de edad, enfrentaba un proceso penal por homicidio desde hace tres años y cumplía la medida cautelar de prisión domiciliaria. Por ello, su esposa creyó en un inicio que la presencia de los sujetos estaba vinculada con dicho procedimiento legal.
Agentes ministeriales realizaron las diligencias correspondientes en la escena del crimen. El cadáver fue trasladado al anfiteatro ubicado al sur de la ciudad de Puebla. La Fiscalía General del Estado abrió una carpeta de investigación para esclarecer este hecho violento que cimbró la tranquilidad de la zona.
Vecinos de Viveros del Valle expresaron su temor, pues señalaron que los delincuentes actuaron con total calma y coordinación, lo que hace presumir que se trata de un grupo delictivo con experiencia en operaciones de este tipo.
Las autoridades ministeriales mantienen la investigación abierta para dar con los responsables de este asalto con violencia que derivó en la ejecución del hombre bajo prisión domiciliaria. Se presume que el objetivo del ataque fue la ejecución de El Flaco y cometieron el robo solo para despistar a las autoridades.
COMENTARIOS