Tres hombres armados sembraron el terror en pleno Centro Histórico de Puebla, luego de irrumpir en el Centro Joyero durante la tarde de este sábado y llevar a cabo un violento robo. El atraco provocó pánico entre trabajadores, clientes y transeúntes, luego de que los delincuentes rompieran vitrinas con martillos y realizaran una detonación de arma de fuego antes de escapar. Uno de los ladrones perdió un tenis al escapar, por lo que huyó como Cenicienta, parcialmente descalzo.
Los hechos ocurrieron alrededor de las 13:44 horas en la intersección de la avenida 10 Poniente y la calle 3 Norte, donde se ubica el Centro Joyero. De acuerdo con los testimonios, los tres sujetos portaban el rostro cubierto y llegaron armados con al menos una pistola y un martillo. En cuestión de segundos, se dirigieron directamente a dos locales comerciales, donde comenzaron a destrozar vitrinas y sustraer joyería diversa.
Una de las empleadas, de nombre Cristina, señaló que los asaltantes aprovecharon un momento en que ella se ausentó brevemente para acudir al sanitario. Fue en ese instante que los sujetos ingresaron, rompieron los cristales del local y se apoderaron de al menos 15 charolas con anillos, pulseras y piezas de joyería artesanal, la mayoría elaboradas en oro. Estimó que, en su caso, el monto podría rondar los 30 mil pesos, aunque el arqueo aún no es definitivo.
Otro de los locales también fue saqueado, aunque hasta el cierre de esta edición no se ha determinado el monto exacto del botín.
Durante su escape, uno de los ladrones realizó una detonación con arma de fuego que provocó el caos entre los presentes. Afortunadamente, no se reportaron personas heridas. En el lugar fue encontrado un casquillo percutido, el cual fue asegurado por las autoridades.
Trascendió que un grupo de vendedores ambulantes reaccionó al escuchar los gritos y logró intervenir, lo que provocó que los delincuentes huyeran apresuradamente por los pasillos del inmueble, evitando así un robo aún mayor.
Las víctimas recibieron orientación para interponer la denuncia ante la Fiscalía General del Estado. Mientras tanto, las autoridades ya analizan las cámaras de seguridad para tratar de identificar y ubicar a los responsables.
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