Momentos de pánico vivieron padres de familia y alumnos de la escuela primaria Guillermo Prieto, ubicada en la colonia San Pedro, al nororiente de la ciudad de Puebla, cuando dos sujetos armados intentaron asaltar a una pareja justo al momento en que los pequeños ingresaban al plantel.
El violento intento de asalto ocurrió alrededor de las 14:00 horas de este miércoles, sobre la calle Benito Juárez, casi esquina con General Lázaro Cárdenas, a escasos metros de Plaza Tolín y muy cerca de la Calzada Zaragoza.
De acuerdo con la información recabada, una pareja había dejado a su hija en el colegio y regresaba a su vehículo, un Seat Ibiza color gris, cuando dos hombres de complexión delgada, morenos y vestidos de negro, se les aproximaron a pie. Los sujetos, que llevaban gorras negras y uno de ellos tenía tatuajes visibles en el cuello, les apuntaron con una pistola corta mientras les decían: “Lo que debes”.
Los delincuentes intentaron subir al vehículo al notar que las llaves estaban puestas, pero el conductor reaccionó rápidamente y las retiró del encendido, frustrando el robo. En ese momento, los asaltantes realizaron dos detonaciones al suelo para intimidar a las víctimas y huyeron corriendo con rumbo a la calle Lázaro Cárdenas.
Padres que se encontraban en los alrededores se resguardaron de inmediato dentro de la escuela, mientras los docentes cerraban las puertas del plantel para proteger a los menores. La tensión fue generalizada, pues las detonaciones se escucharon claramente en la zona.
Elementos de distintas corporaciones llegaron minutos después y montaron un operativo de búsqueda en calles cercanas, sin que hasta el momento se haya reportado la detención de los responsables.
Las autoridades analizan las líneas de investigación para determinar si el ataque se trató de un robo fallido o un intento de agresión directa contra los afectados.
La Fiscalía General del Estado abrió una carpeta de investigación para dar con los responsables de este nuevo hecho violento que, por fortuna, no dejó personas lesionadas, pero sí un fuerte susto entre las familias de la zona.
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